Helen Beatrix Potter nació el 28
de julio de 1866 en Londres, Inglaterra. Su padre, Rupert Potter, era un
abogado amante del arte y la fotografía que, tal vez por eso, nunca ejerció su
profesión. Helen Leech, su madre, pertenecía a una adinerada familia dedicada a
la industria textil en Lancashire.
La familia Potter, típicamente
victoriana, vivía en una gran mansión rodeada de un inmenso parque en Bolton
Gardens, Kensington. Allí llevaban una vida holgada, y de poco trato social.
Beatrix creció sin amistades y, como era corriente en una familia de clase
media alta, los padres delegaron su educación en una institutriz.
Escribe Marc Soriano: "La pequeña Beatrix, por ejemplo, no
iba a la escuela, no tenía derecho a tener amigos ni era jamás presentada a las
visitas. Se vuelve terriblemente tímida; vive encerrada en una especie de
caparazón, tanto en lo que hace a su vestimenta como a su moral. La vestían,
según explicó luego en su Diario, 'como si estuviese siempre a punto de salir
para la iglesia'. Confinada en su habitación lee las novelas de Mary Edgeworth
y sueña con las vacaciones. En efecto, todos los años y mientras los sirvientes
se encargaban de la limpieza primaveral, la familia abandonaba Londres y se
instalaba en el norte de Inglaterra o en Escocia, donde permanecía uno o dos
meses."
Durante esos períodos de
vacaciones tomó contacto con la naturaleza, y ese ambiente le proporcionaría la
materia prima de su futura obra: los animales y las plantas de la campiña.
Apasionada (y enamorada) del medio que la rodeaba, Beatrix Potter comenzó a
observar, registrar y dibujar.
Estudió la vegetación de la zona (especialmente los líquenes y los
hongos), y presentó al Real Jardín Botánico de Kew y a la Sociedad Linnean sus
estudios botánicos. Su pasión se estrellaría contra la rigidez de una sociedad
machista: las mujeres no tenían la entrada permitida a este tipo de
instituciones.
Hacia 1890 logró vender sus
dibujos a la editorial Hildeshmer y Faulkner para ilustrar tarjetas de Navidad.
A su vez, escribió y dibujó su primer cuento para niños, "The tale of Peter Rabbit" (El cuento de Perico, el conejo
travieso) dedicado originalmente para Noel Moore, el hijo de su antigua
institutriz, con quien mantenía correspondencia. Diez años después, el relato
se convirtió en libro:
"Quería que sus libros
fuesen pequeños (de cinco por cuatro pulgadas) y manuables, que ofreciesen poco
texto y una nueva ilustración en cada página. El libro fue rechazado por un
editor en 1901, pero Beatrix, a los 37 años, pareció dispuesta por fin a tomar
el destino en sus manos; decidió publicarlo por su cuenta. Los primeros 250
ejemplares tuvieron tal éxito que los editores Frederick Warne & Co. Ltd.
se interesaron por ella.
"Entre 1901 y 1913 publicó
veinte libros, pasando días enteros frente a los animales, a los que hacía
posar en diferentes posturas. No quería aproximaciones, consideraba que hasta
el detalle más nimio merecía ser registrado por la acuarela."
Las buenas ventas de sus libros
continuaron y, en la actualidad, la firma Warne lleva cerca de 300
reimpresiones de su obra. Pionera del merchandising, en 1903 Beatrix Potter
creó y patentó el muñeco del Conejo Perico de juguete, idea que le generó
importantes beneficios económicos.
En 1905 se enamoró de Norman
Warne, el hijo de su editor. A pesar de la prohibición de los padres de
Beatrix, quienes consideraban poco apropiado que su hija se casara con un
comerciante, la pareja decidió comprometerse. Lamentablemente, Norman Warne
murió al mes siguiente, víctima de una anemia, y Beatrix Potter se recluyó en
la granja Hill Top (Lake District) que había adquirido.
Tiempo después, en 1913, el
abogado William Heelis, amigo y asesor de Beatrix, le propuso matrimonio.
Nuevamente se generó una oposición familiar pero Beatrix, contando en ese
momento con 47 años, aceptó la propuesta.
"Ese matrimonio determina un
giro fundamental en su vida. Beatrix, ahora señora Heelis, se convierte en
farmer, en granjera; se apasiona por la cría de ovejas y consagra su fortuna y
su energía a proteger el campo del norte contra la plaga de la rentabilidad.
Cuando muere, en 1943 (el 22 de
diciembre), lega Hill Top y todas las granjas vecinas que sus derechos de autor
sobre los libritos le han permitido comprar al National Trust, contribuyendo
así a la creación del Parque Nacional de Lake District."
Bibliografía
Mas Álvarez, Inmaculada y
Figueroa Dorrego, Jorge. La genialidad de
Beatrix Potter, en revista Clij, Cuadernos de Literatura Infantil y Juvenil,
Año 4, N° 24. Barcelona, enero de 1991.
Soriano,
Marc. La literatura para niños y jóvenes. Guía de exploración de sus grandes
temas. Buenos Aires, Ediciones Colihue, 1995. (Libro del cual se han extraído
todas las citas que se incluyen en la reseña biográfica).
Tortosa,
Ayes. Beatrix Potter, una verdadera ecologista, en Peonza. Revista de
Literatura Infantil y Juvenil, N° 49. Santander (Cantabria), junio de 1999.
De: http://www.imaginaria.com.ar