jueves, 31 de agosto de 2017

Bajo el Puente del Alma


Diana, tú decías: “La vida es sólo un viaje”.

Quizá por eso no te conformaste con transitar primorosos espacios urbanos.

Pisaste regiones donde la ambición arranca piernas, pieles, pastos, piedras…

Los vulnerables del mundo desean todavía la frescura que la seda de tus abrazos desplegó sobre los vulnerados, como portentosa bandera incitando a otra clase de guerra.

Hollaste los páramos de la indiferencia y del cómplice silencio, telarañas que segregan los poderes.  

Y enredados tus pies, tu cuerpo no pudo seguir viajando los viajes de este viaje. Bajo el Puente del Alma, tu corazón escuchó la voz del altoparlante avisando el final de la migración.


¿Hacia a dónde habrán caminado los luminosos pies de ónix de tu alma en aquel exacto momento? ¿Hacia a dónde? Todavía nos preguntamos. 



Sociología "performática" en Nocturno de Joaquín Suárez (Canelones) por la Profa. Angie Marchelli y los estudiantes de 2º. año de Bachillerato Humanístico.



















“Ante todo, un docente debe formar, antes que informar, porque si Internet le dice -casi todo-, decidir qué es lo que vale la pena recordar y qué no, es un arte sutil.”- Umberto Eco

Siempre les digo a mis estudiantes del Liceo de Joaquín Suárez (en Canelones) que,
antes que nada, deben intentar dialogar con el texto porque, realmente, es un ser vivo;
su voz les hará sentir emociones diversas y hasta contradictorias,
que podrán, a su vez, expresar, en el acuerdo o en la discrepancia.


Rosario Calcerrada  /  Verónica España  /  Micaela Medina  /  
Pía Portela

Estudiantes de 2o.9  del Plan de Extraedad Diurno 
Asignatura: Idioma Español




Con WARIS DIRIE aprendimos la palabra “ablación”, que nos agujereó el cerebro y fortificó nuestra identidad.

Conocer la historia de esta señora nos muestra qué actitud hay que adoptar ante todas las adversidades de la vida o golpes en nuestra niñez, nos sirve para ser mejores personas mejores y no encerrarnos en el dolor causado, superar cada obstáculo que la vida nos ponga por delante; en resumen, es una forma de crecer internamente.

También nos enseña que no se olvida lo malo que nos haya sucedido y hay que vivir con eso, pero siempre intentando ser mejores y ayudar a quienes lo necesiten o hayan pasado por situaciones similares. Que no es valiente quien hace daño, sino quien supera o sobrevive al daño demostrando que es mejor cada día.

También nos deja un intenso mensaje acerca de que a pesar de que se sea una niña, es posible escapar de las situaciones que nos dañan y buscar nuestra propia felicidad sin mirar atrás. Nunca se debe bajar los brazos en la búsqueda de nuestros sueños. Tampoco hay que guardar rencor o venganza a quienes nos lastimaron, y darles una oportunidad para que puedan ver su error en la vida.

La historia de Waris nos recuerda que nunca estamos solos, que siempre habrá alguien en quien confiar, tener esperanza y seguir adelante sin importar cuál sea el reto a cumplir.
Por eso nos animamos a dar un consejo a adultos y adolescentes: “Nunca olvides cuál fue tu herida grande y tomala como un escudo para usarlo en los momentos que necesites, no te conviertas en quien hiere sino en quien sana.

Daiana de León y Gimena Marra

Estudiantes de Primer Año del Plan Semestral Nocturno
Asignatura: Idioma Español




Gracias a ti, admirada Waris,
a mis sensibles estudiantes,
a la Vida...