Confiar el secreto de
mi corazón
Al llegar la noche
un poco embriagada
tardé en quitarme los aderezos de mi peinado
la flor del ciruelo
se había marchitado
en mis desordenados cabellos
el sopor del vino
traspasaba mi sueño de primavera
ese sueño que se alejaba
para no regresar
silencio de los hombres dormidos
lentitud de la luna que se pierde
tras la cortina de color esmeralda
entre mis dedos
enrollaba pétalos marchitos
así
se desprendían
sus últimos perfumes
así
se alargaba un poco más
el tiempo
Como en sueños
sola
sentada en la ventana
¿quién quiere
acompañarme?
al menos con mi sombra
ya
somos dos
pero anochece
la luz de mi lámpara se extingue
mi sombra me
abandona
¿qué puedo hacer entonces?
¿qué puedo hacer?
¡tanta es la pena que me embarga!
De Poesía Completa
Traducción: Pilar González España
Ediciones del oriente y del mediterráneo, Madrid, 2010
De: ADAMAR Revista de
Creación
En la historia de China brilla el nombre de una mujer con luz propia, Li
Qingzhao, considerada como la mejor poetisa de la literatura china clásica.
Aunque en lengua española ya habíamos tenido la oportunidad de leer algunos de
sus poemas seleccionados en alguna que otra antología general de poesía china,
esta traducción, realizada por Pilar González España, la primera que presenta
una antología personal de la autora, abre un camino para el descubrimiento de
otros poetas chinos imprescindibles en el conocimiento de la literatura
universal.
La vida de Li Qingzhao
transcurrió en una época plagada de convulsiones y de grandes cambios
históricos, en la etapa de transición entre la dinastía Song del Norte
(1067-1126) y la dinastía Song del Sur (1127-1279). Durante la dinastía Song
del Norte se reunificó el desmembrado imperio chino tras la caída de la
dinastía Tang en el año 907 y fue uno de los periodos más fructíferos de la
historia de China. Pero las continuas guerras desatadas por tres pueblos
norteños, los Kitan, los Tangut y los Jurchén (Jin), fueron debilitando
lentamente al gobierno de la dinastía Song del Norte, que tuvo que marchar
hacia el sur a causa de la paulatina invasión militar de estas tres etnias;
finalmente se fundó la dinastía Song del Sur, cuya capital se erigió en la
actual Hangzhou.
A Li Qingzhao le tocó vivir
durante este período de transición histórica. Nació en la provincia de
Shandong, en el seno de una familia de eruditos, lo que le permitió recibir una
esmerada educación. Se casó con Zhao Mingchen, bibliófilo de vasta cultura, que
compuso junto a su mujer un Catálogo de Inscripciones en Metal y Piedra. El
amor que le profesó a su esposo no tuvo límites. Zhao Mingchen, por su
profesión, cambiaba de destino continuamente y Li Qingzhao quedaba sola en casa
mientras añoraba la llegada de su marido, como se puede observar en sus poemas
dedicados a la separación de su ser amado. Por la amenaza de los pueblos
bárbaros del norte huyeron hacia el sur. Cuando murió su marido, la poetisa
comenzó un largo periplo sin rumbo por tierras del sur, donde murió a los
sesenta y ocho años de edad.
Entre la escasa obra que se
conserva de Li Qingzhao, hay que destacar los poemas de género "ci"
que legó a la posteridad, composición poética en la que ella brilló por
excelencia. Durante la dinastía Song, el género "ci", que significa
literalmente"canción-palabras", alcanzó su máxima plenitud.
En Poemas escogidos, la
traductora ha seleccionado veintisiete poemas de Li Qingzhao, que al mismo
tiempo ha dividido en tres partes, según la temática, que corresponden
perfectamente a las edades de su vida: poemas de juventud y primavera (diez
poemas), poemas de la separación (ocho poemas) y poemas de la vejez y de la
muerte (nueve poemas). En los poemas de juventud y primavera, la poetisa canta
a la vida y a la juventud, a la belleza y al amor, a la naturaleza y al
esplendor de los cuerpos, a la placidez y a la embriaguez que proporciona el
vino. En los poemas dedicados a la separación, se escucha una voz melancólica
por la ausencia del ser amado, que se encuentra lejos del hogar, percibiéndose
en las palabras un tono triste y solitario, pero con cierta luz de esperanza
por el futuro reencuentro. En los poemas de la vejez y de la muerte,
correspondiente a la última etapa de la vida de Li Qingzhao, cuando ya ha
quedado viuda y camina sin rumbo de un lugar a otro por las tierras del sur, la
voz de la poetisa está anegada de soledad, tristeza y aflicción, porque es
consciente de que los días de la juventud ya se han ido y que los sueños
felices se han perdido para siempre; es decir, la conciencia de la vejez y la
fugacidad de la vida frente a la naturaleza, que siempre permanece.
Todos los poemas están escritos
con gran lirismo y exquisitez, con un dominio excelente de la prosodia del
género "ci", en el que el ritmo del verso y la expresión de los
sentimientos se aúnan para la creación de un universo poético auténtico y
profundo.
La publicación de estos poemas
escogidos de Li Qingzhao significa sacar a la luz otra obra imprescindible de
la poesía clásica china, especialmente de la dinastía Song, como en su tiempo
fue la aparición de los poemas de Su Dongpo, el gran poeta de los Song, del que
ya tenemos una traducción al español realizada por Anne-Helène Suárez
(Recordando el pasado en el Acantilado Rojo y otros poemas, Madrid, Hiperión,
1992).
JAVIER MARTÍN RÍOS
De: www.chinaviva.com
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Desde niña se interesó por la poesía, y sobresalió por su
destreza
en pintura, caligrafía y ajedrez. Era además una notable intérprete de
lira.
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